Dos semanas dan para mucho

Dos semanas han pasado desde la última vez que escribí... Y dos semanitas cargadas de acción! ¿Por dónde empiezo? Pues por el principio, como siempre.

El viernes 13 vinieron a casa los gemelos. Estuve jugando con ellos, haciendo galletas y me ayudaron a preparar la cama para Carmen, que venía a dormir a mi casa al día siguiente, y les enseñé el baile de la canción Danza Kuduro! Cuando acabamos, Mary y yo fuimos a casa de Linda Newell (una amiga de Mary) porque tenía una "fiesta de chicas". ¿Sabéis las chicas que intentan venderos la thermomix, y cuando la compráis van a vuestra casa a haceros degustaciones? Pues igual, pero en vez de la thermomix lo que vendía era como los ingredientes para hacer comidas. Allí estábamos Catherine (su hija), Paula (su alemana), Angie (una vecina suya que es Freshman -grado 9- muy maja) y yo, con madres y amigas de Linda. Nos lo pasamos genial hablando de deportes, del nuevo vídeo de Miley Cyrus, jugando al baloncesto y como no, hartándonos de comer brownie, patés raros de queso y demás.

El sábado amanecí más pronto de lo que me hubiera gustado, concretamente a las 6:15, porque tenía un meet de cross country. Así que ahí fuimos, porque no hay nada mejor que correr a las ocho de la mañana jajaja. Acabé muy contenta con el resultado (quedé primera de mi equipo, y bajé a 26min 54seg) y con el equipo, que lo hizo genial.

Por la tarde fuimos a la feria del condado con los demás exchange students. ¡Menuda feria! Si crees que las que montan en Playa América en verano, con el saltamontes y poco más está genial flipas con esta. Comparable a algunos parques de atracciones. Así que ahí estuvimos toda la tarde montaña rusa para arriba montaña rusa para abajo.

Cuando digo que había de todo, me refiero todo. Porque aquí en las ferias también hay animales que lleva la gente. Cabras, vacas... Con la peculiaridad que los peinan e incluso visten, y los someten a un concurso para ver quien es el más "guapo".

A eso de las cinco nos fuimos con Javi y Carmen a cenar, y luego Mary y Gary nos llevaron a casa de Jorge que celebraba su cumpleaños. Por la noche Carmen durmió en mi casa.

Al día siguiente fuimos a comer la familia de Carmen y la mía juntas. Estuve con sus host sisters que son un cielo, y cuando nos despedimos la pequeña me dijo que podía irme con ellas también y así estaba más con Carmen jajaja. Por la tarde fuimos a misa y al club de jóvenes de la Iglesia, donde conocí a una niña majísima con la que estuve.

Mis comidas americanas

El tema de la semana eran los sacramentos, y yo acórdandome de lo que habíamos dado el año pasado en Religión. Está muy bien porque nos juntamos en grupos pequeños (tipo la confirmación del cole) y hablamos, es todo de hablar y cambiar opiniones.

El lunes fue un día horrible, estaba cansadísima, lo recuerdo como si hubiera sido un sueño jajaja. En el vestuario unas chicas me dijeron ¿eres tú la española? Y yo cuando dije sí todas se quedaron flipando diciéndome que les gustaba mi acento y preguntándome cosas. Ahora siempre que las veo me saludan jajaja.

El martes fue el día que hacían las fotos para el yearbook. Fue muy gracioso porque algunos llevaban unas pintas... Chicas con vestido y tacones, y claro lo piensas y es que en la foto solo sale tú cara así que no sirve para nada jajaja. Las fotos eran en tu clase de literatura, que para mí es a última hora, así que ahí fuimos todos al gimnasio (pasando antes por el baño para arreglarse claro, y algunas a retocarse el maquillaje) y allí estaban los escenarios con el fondo gris claro y los fotógrafos con las cámaras. Son fotos individuales, así que tienes que esperar en fila con toda tu clase, y cuando llega tu turno sentarte en una silla y después de que una señora te dijera como colocarte y arreglarte el pelo (había que ver la cara de algunos cuando les cambiaba el peinado jajaja) te sacaban la foto.

Por la noche fuimos a cenar a un restaurante y allí me encontré a un niño que viene conmigo a clase de francés y que es amigo mío. Si es que el mundo es un pañuelo, hasta en Estados Unidos.

El miércoles tuvimos una reunión de cross country todo el equipo femenino para hablar sobre la temporada, nuestras metas y si nos gustaba. La verdad es que la entrenadora es un cielo, y que haga este tipo de cosas demuestra que se interesa mucho por el equipo.

El jueves en la comida, mis amigos me pidieron que les hablara en español, así que ya me veis a mi hablándoles y ellos sin enterarse de nada. Luego tuve "conversaciones" con algunos de ellos que se basaron en Hola, hola qué tal?

Y por fin llegó el viernes, con un baño de hielo en cross country! Sí, de dos en dos nos metíamos en una bañera llena de hielo (meterse es relativo, te mojabas hasta donde querías aunque hubo gente que se metió enterito) y el reto era aguantar siete minutos. Solo diré que yo aguante 20 segundos... Y el hielo no me llegaba a las rodillas. Pasar frío no es lo mío.

Por la noche fuimos a cenar a un buffet de pizzas, donde te puedes hartar de tomar pizza, porque la tienes hasta de postre! Con masa dulce y relleno de fresas o chocolate.

El sábado tuve otra carrera de cross, muy importante porque era de todo el condado. Me superé a mí misma haciendo la carrera en 25min 34seg! Y cuando acabé mi entrenadora me dio un fuerte abrazo diciéndome que estaba muy orgullosa de mí. Me encanta este deporte, y ver como te superas a ti mismo. Creo que ha sido una de las mejores elecciones que he hecho desde que he llegado aquí.

Ya había pasado la meta hace dos segundos eh! ;)

El domingo quedamos unas cuantas amigas en el centro comercial para ver vestidos para Homecoming, que es el 19 de octubre. Acabé harta de tanto vestido que vi. ¡Los había a montones! Vestidos que iban de los 30 a 160 dólares, a cada cual más hortera. Al final acabé comprándome uno en JC Penneys (una especie de Corte Inglés pero mas pequeño) muy americano.

Un chico pidiéndole para ir a homecoming a su novia, escribió en unos globos la proposición. 

¡En medio de la tienda!

Después, fui a  misa, donde estuve con Sarah, Madison y Shelby (del cole) y una vez acabada con Kristeen (la chica que conocí el domingo anterior) Leah, Paula (una exchange student española) y Angie, que era su primer día en el grupo. Esta vez estuvimos hablando de costumbres que tenemos en las fiestas, y yo dije que en España tomábamos uvas en fin de año y todos diciendo "Ohh yo también quiero!".

Y ayer empezamos otra semanita más. Con un simulacro de incendios a primera hora (ya es el tercero), haciendo nuestro proyecto de ciencias Madison, Lauren, Kyle, Marcus y yo en la sala de ordenadores mientras el resto de la clase tenia "lectura en silencio" en clase. Madison, Lauren y yo vamos a hacer un proyecto tipo CSI, mientras que Kyle y Marcus no lo han decidido aun, aunque algo han visto de hacer cookies sin horno...

Por la tarde fue el peor entrenamiento al que jamás he ido. Como esta semana no tenemos carrera, toca una semana de entrenamientos duros. Ayer concretamente "millas suicidas", ya os podéis hacer a la idea. Empezamos corriendo una milla, seguido de cinco ejercicios a lo largo de toda la pista de atletismo, tipo flexiones, saltos y cosas así. Luego escaleras, que consistía en subir y bajar las escaleras de las gradas saltando, a la pata coja, rápido... (Hay tres gradas, con cuatro pares de escaleras cada una) Y otra vez correr otra milla y repetir todo. Acabé muerta.

Hoy mi día empezó oyendo mi nombre en los anouncements. Todos los días, antes de empezar la primera clase, anuncian por megafonía todo lo que ha pasado o los próximos eventos. Pues hicieron una referencia al meet del sábado, y dijeron mi nombre entre las personas que mejor marca personal habían tenido. Y la gente aplaudiéndome y diciéndome que ellos que llevaban 16 años en Estados Unidos nunca habían dicho su nombre por megafonía.

Mañana no tendré clase las tres primeras horas, ya que todos los juniors tienen un examen que necesitan hacer para ir a la universidad. Ventajas de ser una estudiante de intercambio.

Y esto es así un resumen "rápido" de mis últimas aventuras.

Un beso a todos!!